Los momentos de estrés en pareja son oportunidades claves para crear y consolidar un vínculo seguro

Cuando mi pareja experimenta alguna emoción que le sobrepasa, le abruma o le desborda, lo que necesita su sistema nervioso es regularse, es decir, poder organizar su experiencia interna para recobrar la calma.

Para ello, no sólo es saludable que cuente con herramientas para reconfortarse y calmarse a sí mismo/a. También es altamente saludable que pueda contar con un otro que sea capaz de corregularle de manera eficiente. En estos momentos, el rol que me toca desempeñar como pareja es crítico.

La neurobiología de mi pareja en situación de estrés experimentará el impulso automático de entrar en contacto conmigo (ese impulso puede o no expresarse saludablemente) y mi actitud o respuesta tendrá un impacto profundo sobre su sistema nervioso, en una de dos formas: aliviando su estrés o amplificándolo. 

Lo que debo tener presente es que la respuesta que un sistema nervioso estresado necesita para regularse no es cognitiva, sino emocional. El gran desafío para mí en esos momentos, es saber ser refugio emocional seguro para el otro/a. Si en mi historia vincular previa, conté consistentemente con personas sensibles que estuvieron para mí en momentos vulnerables, es más probable que sepa ofrecer ese refugio al otro/a, sin mayor dificultad.

Pero si no tuve esa fortuna, es muy probable que las emociones de mi pareja me angustien, me asusten, me irriten o me despierten rechazo... en realidad lo que ahí me pasa internamente es que me resulta abrumador o amenazante conectar con mis propias emociones vulnerables ante la vulnerabilidad del otro.


Pero no puedo olvidar que estos son los momentos preciosos claves para crear un vínculo seguro y fortalecer nuestra conexión. La calidad de mi respuesta será parte determinante del curso que tomará nuestra relación!!

Ser refugio emocional seguro en momentos necesidad implica ofrecer a mi pareja escucha, calma, validación y consuelo. Y si no sé cómo hacerlo, puedo aprenderlo!!